El dolor puede controlarse con la mente a través de la hipnosis.

Aún con todos los avances de la medicina, lo cierto es que en pleno siglo 21 existen millones de personas que no logran eliminar de sus vidas el dolor, ya sea este crónico o agudo. Esta imposibilidad de eliminarlo causa severos cambios en la vida personal, familiar, laboral y emocional de quienes lo sufren.
La mayoría ha visitado médicos especialistas, realizándose exámenes y cumpliendo con los tratamientos. Pero, en cuanto dejan las pastillas los dolores vuelven. Un proceso que desconcierta al paciente y que generalmente puede deprimirlo creyendo que nunca se va a mejorar. Frente a esta situación decidimos informarnos entrevistando al Psicólogo Clínico Boris Araos, que nos atendió en su consulta de la Clínica Las Condes.
Fue una grata sorpresa contar con su amabilidad y la forma didáctica de explicarnos sus planteamientos en relación al tratamiento de los pacientes que sufren dolores crónicos y agudos.

Su definición fue clara:

  • Tenemos el dolor agudo, de duración limitada, menos de tres meses y habitualmente con una causa conocida, como por ejemplo la fractura de una pierna. En ese caso los médicos pueden hacer un tratamiento efectivo porque conocen que la fractura es la causa conocida del dolor y saben como aliviarlo. Una vez superada la fractura seguramente el dolor desaparecerá. Para este tipo de dolor con causa conocida, las medicinas como pastillas o analgésicos resultan casi siempre efectivos.
  • Por otra parte, el dolor Crónico es aquel que dura más de tres meses, muchas veces sin una causa física que lo explique, y con frecuencia es tratado con diversos tipos de medicamentos que no logran eliminarlo, sólo controlarlo en forma temporal y genera un sufrimiento permanente, agrega el Psicólogo, por ello, la gente busca alternativas como por ejemplo la acupuntura, el reiki, por citar a algunos, pero que igualmente, resultan de tipo transitorio, es decir, que hacen efecto sólo mientras se está realizando el tratamiento. Es bueno decir que han aparecido en el mercado distintas ofertas para tratar el dolor, gente que no tiene la preparación ni la experiencia requerida asegura que sanará con tratamientos de hipnosis pero como no están capacitados el resultado es negativo. Puede tratarse de cualquier tratamiento, incluso de una operación pero éste no se quita ni desaparece, es más el paciente queda peor. Es lo que llamamos iatrogenia.

Con estos antecedentes preguntamos a Boris Araos:

Entonces; ¿Existe alguna otra forma de eliminar o aliviar el dolor crónico?

Boris Araos es enfático:

Sí, existe, lo primero es buscar las causas. Hay muchos factores emocionales que pueden causar dolor crónico. Por ejemplo, el dolor de espalda con frecuencia es causado por estress. Cerca de un 40 % de las mujeres que sufren de fibromialgia han sufrido abuso sexual en la infancia. Y no existen píldoras para superar ese trauma. Pero con hipnosis de regresión si se puede lograr.

¿Porqué cree usted, que la Hipnosis es más efectiva que un tratamiento convencional?
La verdad es que la Hipnosis apunta al inconciente y se logra una mejoría más rápida y efectiva, digamos que el consciente no sabe porqué tiene ese dolor y por ende hay que averiguar en el inconciente. Esto se logra luego de hacer una evaluación del paciente que permitirá decidir el tipo de hipnosis a utilizar.

¿Se considera la Hipnosis como un tratamiento alternativo a la medicina tradicional?
No, no es un tratamiento alternativo, como puede considerarse la acupuntura o reiki, sino que es un tratamiento complementario; de hecho los pacientes que llegan a mi consulta lo hacen después de tratamientos médicos tradicionales y luego de exhaustivos exámenes como radiografías, scanner e incluso operaciones.

Qué pasa con respecto al temor del paciente al pensar que puede quedar absolutamente dormido y que la persona que lo hipnotiza pudiera manipular su mente?
No, no hay nada que temer porque yo trato a mis pacientes sin que la persona pierda el control de su mente, no es necesario llegar a un trance sonambulístico, donde la persona está como dormida, para aliviarse del dolor, basta con un trance de nivel moderado.
Existen diversas técnicas hipnóticas para aliviarse del dolor. Por ejemplo; el paciente aprende a visualizar su dolor: Si ve el dolor rojo y grande y muy caliente, le pido que vaya poco a poco visualizándolo más pequeño, con un color cada vez más pálido y cada vez más frío. En otros casos, a través de la llamada anestesia hipnótica, la persona imagina que le clavan una aguja y que le entra anestesia gota a gota. A medida que esto ocurre el paciente siente que la zona con dolor se adormece y se anestesia. La mente puede hacer eso. Existen muchas otras técnicas para aplicar según el caso de cada paciente.

¿Qué grado de efectividad tiene la hipnosis para controlar el dolor tanto agudo como crónico, según su experiencia?
De acuerdo con mi experiencia considero la hipnosis tremendamente efectiva, especialmente para aliviar dolores de cabeza crónicos y fibromialgia. Sin embargo, para lograr un éxito permanente es necesario que el paciente aprenda a hacerse autohipnosis para aliviarse del dolor. Para eso, grabo el ejercicio que hacemos en la consulta y lo entrego a la persona para que lo siga poniendo en práctica en su casa. De este modo, el consultante aprende a aplicarse a sí mismo la hipnosis curativa. Con este sistema se evita que el paciente dependa del todo y en forma continua del profesional que lo trata.

Nuestro entrevistado destaca en forma muy especial que la hipnosis busca la mejoría desde adentro hacia afuera que en la práctica significa detectar primero las causas psicológicas o físicas del dolor y según eso elegir el tipo de hipnosis a realizar. También la hipnosis es útil en pacientes oncológicos, tanto para aliviar el dolor o al menos para que éste no aumente, como para disminuir los efectos desagradables de la quimioterapia, especialmente las náuseas y el cansancio extremo.

Existe un problema de dolor crónico cada vez más frecuente, que se llama Fibromialgia. En esta enfermedad, la persona sufre de un dolor extendido a muchas partes del cuerpo, generalmente cuello, hombros, espalda, brazos, a veces también se extiende a las piernas, hasta la planta de los pies. El dolor se debe a una intensa contractura de los músculos, en gran medida causados por estrés laboral o familiar. Este problema no tiene cura con la medicina convencional. Pero con hipnosis, se busca cambiar la forma de pensar y ver las cosas, se busca un cambio de estilo de vida y la incorporación de ejercicios físicos adecuados y una alimentación adecuada, el paciente puede mejorarse. Lo mismo ocurre cuando se aplica este tratamiento para la cefalea o dolor de cabeza crónico. Esto ocurre porque le enseñamos a los pacientes a manejar el stress y así evitar que venga el dolor. Vale la pena decir que un claro síntoma de stress es el insomnio, donde habitualmente el paciente recurre a todo tipo de pastillas, lo que no es un tratamiento efectivo porque el dolor aparecerá nuevamente al dejar las pastillas. De allí nuestra recomendación de que la persona aprenda a prevenir el dolor y esto se lo enseñamos a través de la Hipnosis.
¿Basta con la hipnosis para mejorarse totalmente?
La hipnosis resultará un tratamiento definitivo siempre y cuando el paciente coopere absolutamente convirtiéndose en sujeto activo, es decir, aprender a llevar una vida más sana con una alimentación adecuada dejar de fumar y hacer actividad física, entre otras cosas. Esto es muy importante, no se trata en este tipo de tratamiento que el paciente se siente de brazos cruzados a esperar que la autohipnosis le haga efecto milagrosamente; es indispensable su cooperación para que siga haciendo los ejercicios de relajación y mantenga una conducta adecuada a los nuevos hábitos de vida. En este sentido cuando el paciente coopera, cumpliendo las instrucciones que se le han dado es posible que los dolores causados por la fibromialgia lleguen a desaparecer en 6 a 10 sesiones de hipnosis.

¿La hipnosis puede ser un método para curar la depresión?
La hipnosis es muy efectiva para curar la depresión de verdad y no sólo tapando los síntomas como lo hacen los antidepresivos. Con la hipnosis uno busca la raíz, la causa vital por la cual la persona se deprimió, ya sea por una relación interpersonal conflictiva e insatisfactoria, o por una baja autoestima o por un mal manejo de las tensiones y problemas de la vida diaria. Al tratar la causa profunda de la depresión, la persona se mejora de verdad, no necesitará tomar pastillas para estar bien. Sólo en los trastornos bipolares es probable que la persona necesite medicamentos, por disfunción de la química cerebral, pero eso no es muy común.